Enero llegó y con él la
incertidumbre del qué será. Abrí la maleta cargada de propósitos
y sonreí sintiéndome capaz incluso de alcanzar la luna. No conseguí
echarte de cada rincón de mi casa y la cama seguía sabiendo a
despedida. Fue este un mes de combatir los fantasmas, de quemar fotos
y almidonar nostalgias, de tratar de ahogar desventuras. De saltar
por encima de la derrota y caer por las ventanas de la insensatez.
Febrero me trajo mi
primer cuarto de siglo, la certeza de saberme joven pero ya no tanto.
Pisé las calles de Valencia en plena ola de frío y las olas de la
playa mojaron mis pies descalzos. 0º grados en el termómetro y sin
embargo algo me ardía por dentro.
Marzo me separó de
algunos amigos, todo acaba si no te empeñas en que sea eterno. Lloré
y reí a partes iguales. Caí en un pozo del que nadie vino a
salvarme y aprendí a salvarme solo. Escribir fue mi cuerda, la
música mis fuerzas. Visité las ciudades más hermosas en las que
nunca he estado, Barcelona y Zamora, al lado de alguien que vino de
lejos, con otro acento y al que ahora puedo llamar hermano. Lloré
mientras cantaba y entregué a alguien mis alas.
Abril pasó sin pena ni
gloria. Echando de menos personas que ya no estaban. Intentando
borrar tu olor de mis paredes y pasillos, quedándome en el intento.
Fue un mes de negar evidencias, de engañarme a mi mismo, de
autoconvencimiento y autoconsuelo, de dolor y rabia.
Mayo desempolvó las
telarañas de la utopía, la necesidad de seguir venciendo días
rojos. La esperanza de que quedan cosas por vivir y tiempo para ser
feliz. Mayo me devolvió las fuerzas y dejó a cambio alergias,
escotes y prisas por recuperar el tiempo perdido.
En Junio aparecieron
nuevas personas, nuevos horizontes, nuevos olores y nuevas vidas por
descubrir. Las ganas de enamorarme de nuevo, las escapadas y los
portales a oscuras a escondidas. La poesía y los versos
devolviéndome las ganas de reír.
Julio fue momento de
reencuentros. El brillo de unos ojos hizo cosquillear de nuevo mi
estómago. Fue mes para recapacitar y pedir perdón, un mes de
abrazos y calma pero también fue un mes de pérdida y entierro, se
agotó para siempre tu reloj sin avisar, (aunque quiero pensar que
ahora estás en un sitio mejor) y recapacité mucho sobre el tiempo
que se nos escapa y las oportunidades que perdemos. Es triste saber
que la mejor lección de vida te la da la propia muerte y que a veces
las familias sólo se reúnen al completo en los funerales.
Agosto me devolvió al
mar. Navegué de nuevo y recordé viejos tiempos y añoré el pasado.
Me acordé de personas que fueron parte de mi vida con las que
compartí sabor a sal y vaivenes en cubierta. Santander me mostró
sus dos caras y quedé prendando de su belleza.
Septiembre me dejó el
sabor más amargo de las despedidas no esperadas. De la derrota más
absoluta. El saberme perdido y sin brújula pero también la
liberación más extrema que podía haber esperado nunca. Por fin mi
casa quedó libre de fantasmas aunque yo me convirtiera en uno y
empezara a vagar y a divagar, negando y aceptando a partes iguales en
un bucle casi infinito. También me trajo a personas nuevas que desde
entonces me han acompañado como si lleváramos toda una vida juntos,
gracias a eso confié de nuevo en el ser humano y el mundo fue un
lugar más amable. Aprendí a cerrar las puertas en las que sólo hay
dolor tras ellas.
En Octubre caímos para
siempre del trapecio, sumando otro gol en el marcador de las
derrotas.
Las reuniones de cerveza
y escritura fueron una constante, devolviéndome la esperanza,
haciéndome creer e ilusionarme con nuevos proyectos. Constatando que
todo el camino andado todos estos años no ha sido una pérdida de
tiempo. Empecé a unir letras con la poesía y la fotografía,
haciéndome querer y creer en lo que hacemos, trayéndome las ganas
ingenuas de querer cambiar el mundo. Que nunca es poco. Un nombre me
recordó que había amado alguna vez, suspiré como nunca y escribí
como siempre. Empató la victoria el partido.
Noviembre fue mes de
huelga general, de protestas en la calle, de decir basta. Puse cara a
personas que llevaban años tras la pantalla, quise mucho, abracé,
lloré, escribí y viví todo de una forma muy intensa. Fui feliz.
En Diciembre sobrevivimos
al fin del mundo y ya van dos en lo que tengo uso de memoria. Pandora
cerró su caja. Supe que mi corazón se lo habían echado de comer a
los patos y en lugar de entristecerme me alegró: ahora mil patos
llevan un trozo de mi y eso me otorga un ejército de por lo menos
mil aliados. Compartí piso por primera vez en mucho tiempo.
Tuve un valor cobarde: le
confesé a mi musa que lo era. Y me senté a hacer repaso...
Pasan
tantas y tantas cosas en un sólo año, que definirlo como bueno o
malo se quedaba corto. A todos los que estuvieron cuando los
necesité: gracias de corazón. A todos los que se fueron: un brindis
en su memoria.
Seguimos vivos, que no es poco. Y este ejército sólo para locos, románticos, soñadores y nostálgicos, nos demuestra que cada vez somos más: Más fuertes, más sabios, más listos, más torpes al besar y más seguros al amar.
ResponderEliminarY nunca dejamos de aprender, nunca. 2012 trajo muchas cosas malas para todos, pero alguna buena que hemos salvado de la destrucción de un año malo, y que en 2013 puede darnos la vida.
Cuídate.
Me alegro que poco a poco el final del año haya ido siendo mejor que el principio, ojala que siga todo en ascenso.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de año!!
Mis mejores deseos para el 2013, un fuerte abrazo, felicidades.
ResponderEliminarY qué frio estaba el mar de Valencia! Ha sido un año muy completo, con desilusiones y disgustos, pero hemos sobrevivido y eso es lo que cuenta! Feliz 2013 Oski!
ResponderEliminarDoce párrafos, pensamientos, infinitos y, en cada ellos, emociones a flor de piel, añoranzas, recuerdos de un ayer cada vez más distante y un futuro en el horizonte impregnado de nuevos olores, nuevos sabores y proyectos maravillosos. Y espero en este 2013, disfrutar de tus éxitos, de tus risas y de tus letras. Besos enormes, como tu amistad.
ResponderEliminarCon cada nuevo relato tuyo tengo mas claro que el mejor regalo que te pueden hacer es un libro tuyo, y mientras este llega, unos minutos con buena música de fondo y en la pantalla del ordenador tu blog... Eres increíblemente GRANDE como escritor, pero indudablemente INCREÍBLE como persona, por eso yo me siento afortunada por poder decir que tengo la suerte de tenerte, de alguna manera, en mi vida. GRACIAS Masoquista por todo, de verdad. Un besazo de parte de un unicornio asustadizo
ResponderEliminarFeliz 2013. Y que en un año volvamos a repasar juntos los 12 meses anteriores.
ResponderEliminarY este año el casillero de las derrotas quedará a cero, porque supiste vencerlas a todas!
ResponderEliminarNo había nacido en el 68 pero cuando leo tu mayo dan ganas de salir a celebrarlo y un frente de pancarta que ponga Renaciemiento!
Y no he dejado de ver volar un trapecio de un lado a otro de los días, y los tropiezos ya no son lo mismo para mi desde aquella página, y la utopía será roja siempre!
¡Feliz año camarada!
Desde l`ardennes un abrazo!
Feliz Año Oski!, para este 2013 sigue viviendo tan intensamente y cuéntanoslo como sólo tu sabes...
ResponderEliminarUn abrazo
Afortunadamente seguimos vivos para poder contar que sobrevivimos al fin del mundo. En 366 días hemos vivido tantas cosas que como bien dices es imposible calificarlo de bueno o malo, aunque ya sabes que yo deseaba con todas mis fuerzas que llegara el 13. Ahora me doy cuenta que lo único que le puedo dar al 2012 es las gracias. A él y a ese ejército de mil patos que nos hacen volar.
ResponderEliminarGracias presi por dejarte poner cara ;)
¡A por el 2013! Año de la conquista batatija
Un besote!
A veces me pregunto cómo es posible que a estas alturas sigamos vivos... otras veces hago un repaso y creo que no ha sido del todo un mal año.
ResponderEliminarEn cualquier caso, solo con pensar en los proyectos de 2013, se me olvida el año pasado ;)
Un abrazo!
Has tenido un año de luces y sombras, de eso no hay duda, de subidas y bajadas como en una noria de feria, pero creo que a casi todos nos ha pasado lo mismo. No me gustaría tener una vida lineal, para eso ya hay unos aparatos en los hospitales que no significan nada bueno, así es que, que sigan las líneas en ascenso y descenso, que por algo estamos vivos¡¡¡. Deseo que este año qeu comienza... sigan los vaivenes. Un beso.Muackkkkkkkkkk
ResponderEliminarQueremos más! :)
ResponderEliminarSin dudas has nacido para escribir y para otras cosas, jaja... Y lo mejor es que la vida continua pese a todo y gracias a todo.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo Oski y se feliz!
El año terminò y el balance que puedo hacer de èl es bueno mejorable.
ResponderEliminarun abrazo
fus
La de cosas que pasan... Y todo nos parece a veces rutinario.
ResponderEliminarBesos
Very cool blog. Interesting posts. ;)
ResponderEliminarNice atmosphere guests with you here on the blog. ;]
Yours. Have a nice day. !
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I'm very concerned about this, please. :)
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Y ahora más meses por delante para llenarlos de vida... ya casi nos hemos fundido el primero :P
ResponderEliminarUn abrazote