El relato de ésta semana lo he escrito con la colaboración de María, dos visiones de una misma historia, dos formas diferentes de relatar un mismo hecho. Un placer haber compartido historia con ella, me ha permitido vivir "Mi particular paseo para recordar". Espero que os guste. Sus párrafos están escritos en cursiva.
-¿La habitación del deseo? ¿Qué narices será eso? ¿Una experiencia única que nunca he vivido? Seguro que es otra estafa de esas, pero la verdad es que estoy intrigado.
El lunes 18 de junio… justo cuando empiezo las vacaciones. Creo que me acercaré a ver de qué se trata… Hace algo así como tres años que no voy al “Patrick’s Park” y todavía recuerdo lo bien que nos lo pasamos y lo mucho que nos reímos la última vez… Aunque esta vez tendré que ir yo sola porque los demás todavía curran… Aún así, iré de todos modos… que la nueva atracción tiene muy buena pinta…
Hoy es Lunes 18. No sé que hacer, llevo toda la semana soñando con la dichosa habitación y la verdad es que me apetece muchísimo ir. La intriga nunca me ha gustado, quizás sea un simulador de esos en los que vives una aventura, quizás formes parte de un teatro o quizás, sea solo una estafa, creo que me he decidido. Cojo las llaves de mi viejo Seat Ibiza, bajo a la calle, arranco y me pongo en camino, enciendo la radio y ante mi sorpresa ninguna emisora funciona, lo que me faltaba...
Hoy empiezo las vacaciones, ayer estaba muy entusiasmada y hoy… hoy todo ese entusiasmo se ha convertido en aburrimiento: ¡¿Qué narices hago yo ahora con tanto tiempo libre si nadie puede, todavía, compartirlo conmigo?! -me dije- Entonces recordé aquel anuncio que había leído unos días antes en el periódico y que hablaba de la nueva atracción del “Patrick’s Park” y ya encontré algo en qué ocupar mis primeras horas de libertad. Me fui a la ducha, me tomé el café vienés de rigor y con mis cómodas carmelitas nuevas, me subí en mi, por fin, reparado C3 azul celeste, con destino: el parque de atracciones. Un cd con una selección de canciones de Alejandro Sanz: mi obligado compañero de viaje, ya que, por algún motivo que todavía no me explico, ninguna emisora de radio funciona…
Cojo la autovía, apenas circulan coches a mi alrededor y hay una espesa niebla, como la radio no funciona pongo un cd y empieza a sonar "Se le apagó la luz" ¡no podía ser más oportuna!, de repente oigo un fuerte ruido y tiembla el volante como si acabara de atropellar algo. Miro por el retrovisor interior pero la niebla no me deja ver nada así que decido parar en el arcén. Salgo del coche y me acerco lentamente, descubro con horror que he atropellado un gato negro. No sé si respira aún pero tampoco quiero comprobarlo así que me vuelvo a subir al coche y prosigo mi camino. Después de 20 minutos entro en el aparcamiento del parque y solamente veo un coche, un C3 azul celeste.
Subo el volumen de los altavoces al máximo para canturrear, a voz en grito, “Aquello que me diste” y justo en el momento preciso en que acaba esa canción y comienza la siguiente, que no es otra que “Se le apagó la luz”, escucho un estruendo y noto como algo golpea los bajos del coche. Echo el coche al arcén y me bajo para ver qué es lo que ha pasado… Un gato, un horripilante gato negro y sin rabo, no sé si a causa de mi atropello o porque ya estaba así, se debate entre la vida y la muerte. Hago como si no hubiera pasado nada, vuelvo a subirme en el coche y veinte metros después, entro en el desierto aparcamiento del parque de atracciones.
Me bajo del coche y me dirijo hacia la taquilla del parque, allí no hay nadie pero la puerta principal se encuentra abierta de par en par así que decido entrar, encuentro carteles por todos lados que anuncian: Hoy Gran Estreno "La habitación del deseo", seguir la flecha. Obedezco y las sigo, en el parque tampoco hay nadie, ni trabajadores, ni visitantes, no me lo explico y empiezo a sospechar, me entran ganas de marcharme de allí pero la curiosidad me puede y por fin llego a una puerta con un gran cartel luminoso de neón que anuncia "La habitación del deseo".
La taquilla de la nueva atracción, así como todo lo demás, está tanto o más desierta que el aparcamiento, pero dado que la puerta está abierta, no me lo pienso dos veces y entro. La curiosidad me puede y el hecho que te todo esté tan vacío me hace pensar que no es por casualidad. En los laberínticos pasillos, un sinfín de carteles con flechas que me indican la dirección que debo seguir y al final del último y más estrecho corredor, una puerta enorme franqueada por un letrero de neón en el que reza: “La habitación del deseo”.
Entro a través de un largo pasillo y me encuentro con el lugar más extraño y desordenado en el que he estado nunca, cientos de cd's aparecen desperdigados por el suelo, hay libros llenos de polvo abiertos a la mitad, las paredes están rodeadas de posters medio descolgados, hay ropa tirada por todos lados y al fondo una infinidad de puertas con carteles de película...
Hay una que me llama la atención más que ninguna otra, tiene el cartel de "Gilda" y por fin me decido y agarro el pomo.
Y tras un nuevo pasillo, una verdadera “habitación de ensueño”, al menos para mí. Las paredes, pintadas en azul celeste; de unos altavoces enormes suena una de mis canciones favoritas; sobre una pequeña mesita, un cuenco repleto de chucherías; en una pequeña cesta, colocada en una de las esquinas, reposan plácidamente cuatro cachorros de bulldog, cada cual más adorable que el anterior… sigo curioseando, y observo que, justo en la pared de enfrente a la puerta por la que he entrado, hay un sinfín de puertas más. En cada una de ellas, hay pegado el cártel de una película. Son películas que ya he visto, a excepción de una,“Gilda” y, esa es la puerta que escojo para abrir y ver que hay tras ella.
Abro y una luz cegadora me deslumbra, entro y el olor a salitre impregna los poros de mi piel, el suelo se convierte de pronto en arena, no tardo en descubrir que me encuentro en una playa. Cerca de unas rocas se encuentra varado un barco, parece abandonado y está destartalado, las olas golpean su casco arrancando en cada sacudida unos cuantos tablones. No hay nadie más en la playa, decido mojar mis pies en el agua, la cual está realmente fría. La brisa sopla muy fuerte y creo oír llorar a alguien, los lamentos provienen del barco y me dirijo hacia allí.
Nada más abrir la puerta, soy deslumbrada por una cegadora luz. Cuando por fin soy capaz de abrir los ojos, veo que lo que hay detrás de la puerta que escogí, no es otra cosa que una playa. Camino por la arena, y una vez que mis pies, que ahora están descalzos, tocan la cristalina agua, veo aparecer de la nada un barco. Me acerco a él, que se encuentra encallado en unas rocas y subo, simplemente porque tengo la necesidad de hacerlo. Hay una especie de fuerza extraña que me empuja a hacerlo y yo no puedo negarme. Así que, a pesar del mal rollo que me dan los barcos y de lo que mareo en ellos, camino por el portalón de acceso a este y deambulo de un lado a otro de la cubierta.
Subo al barco por una escala y llego hasta la cubierta principal, hay muchos tablones rotos por lo que empiezo a caminar con sumo cuidado, veo unas escaleras que se dirigen hacia el puente de mando. Vuelvo a oir llorar a alguien cada vez con más fuerza. Entro por una puerta donde se encuentra el timón del barco y muchas cartas de navegación sobre una mesa, decido seguir hasta el fondo donde unas letras doradas grabadas en la puerta anuncian: "Comandante", los lloros provienen de esa estancia. Abro la puerta y el lujo y la ostentación me sorprenden en relación con el resto del barco, hay muebles de madera victorianos, sillones de terciopelo y cuadros de batallas navales en los mamparos. Descubro de donde provienen los gritos, hay una niña de unos cinco años tapándose la cara con las manos, me acerco a ella y le pongo amistosamente una mano sobre el hombro.
-¿Por qué lloras niña?-le digo con toda la delicadeza de la que soy capaz
- He perdido a mi gato-me dice entre sollozos mientras se gira y de destapa la cara
Ante mi horror descubro que no tiene rostro, me asusto y doy dos pasos hacia atrás chocando contra algo.
Lo que creo que es el llanto de un niño, me hace subir por una escalinata hasta el puente de mando, sigo caminando guiada por ese supuesto llanto y entro en una estancia que, debido al lujo que la caracteriza, nada tiene que ver con el resto del destartalado barco. “Esto tiene que ser el camarote del capitán” –me digo-. Y entonces vuelvo a escuchar, ahora con suma claridad, ese llanto y sollozar que creía haber oído. Ante mí, un niño de unos cinco años que, cubriéndose la cara con las manos, llora desconsolado. Me acerco a él, acaricio su cabeza y poniéndome de cuclillas en el suelo le pregunto: “¿Qué te pasa?, ¿por qué lloras?”. “Estoy triste porque he perdido a mi gato” –me dice-. Tras lo cual, aparta las manos de su cara y descubro que no tiene rostro, que la nada se ha apoderado de sus ojos, su nariz, su boca… Asustada, retrocedo y me choco de espaldas con algo…
Me doy la vuelta y veo una mujer de unos veintipocos años que me mira con cara de terror, salgo corriendo del camarote y lo que veo me da un vuelvo al corazón, el barco ya no existe, ya no hay mar, ni gaviotas, ni rastro de arena, ahora estoy en una habitación oscura en la que suena una lóbrega melodía. Camino a tientas y choco contra algo que hay tirado en el suelo, me agacho a comprobar y con las manos palpo un pelaje suave, entorno los ojos y me doy cuenta de que es un gato, el mismo que atropellé de camino al parque.
Me giro, veo a un chico de unos veinte y el instinto me hace salir corriendo del camarote. Una vez traspasada la puerta, descubro que el barco ha desaparecido. Ahora estoy en una habitación en la que no hay nada, absolutamente nada, tan sólo una simple bombilla que pende del techo, ilumina el centro de la misma. Camino hacia la luz y me doy cuenta de que hay algo en el suelo, justo debajo de la bombilla. Para mi asombro, descubro que se trata de un gato. El mismo gato que había atropellado unas horas antes…
Alguien me pone sobre el hombro una mano, me doy la vuelta arrodillado y veo otra vez a la niña, veo que de su rostro sin ojos caen lágrimas, me pone las manos sobre mi cara, me dice gracias y se marcha. Me toco el rostro y descubro que no tengo ojos, ni nariz, ni boca, intento chillar pero no soy capaz de ello, busco desesperadamente una puerta por la que salir de ese maldito cuarto pero no hay ninguna. Solo oscuridad y un hombre sin rostro que llora.
“Era mi gato y tú lo has matado” –repite una y otra vez el niño sin rostro que, lentamente se va acercando hacia mi-. De repente, la bombilla se apaga, siento una punzada en la boca del estómago y noto como la nada que me rodea se apodera también de mí…
NOTA: Éste relato forma parte de mi participación como miembro de "El cuentacuentos". Se encuentra bajo una licencia © Creative Commons.
¿Qué te digo esta semana yo a ti?
ResponderEliminarUy qué nervios!!! no sé por dónde empezar!!! jejejeje :P
Pues nada, que me ha encantado escribir contigo. Me lo he pasado muy bien y me he reído un montón. Además, me ha sorprendido muchísimo lo fácil que ha sido ponernos de acuerdo en "casi todo" (porque tu querías que yo sufriese una muerte lenta y dolorosa. Y lo peor de todo: querías contarla con todo lujo de detalles!!! Pero en eso no te has salido con la tuya! jajaja :P).
Hablando en serio niño, que sabes que me encanta tu forma de escribir y estoy muy contenta con el resultado de nuestra historia (espero que la primera pero no la última...) a medias.
Mil besotes, mil aplausos y mil gracias por dejarme dejar un pedacito de mí y de mis letras junto a las tuyas!!
P.D. Pero que sepas que jamás te perdonaré que yo te haya nombrado como "un chico de 20 años" y tu a mí como "una mujer de veintipocos..." ¡¡¡qué capullo!!! :P
Tremendo tremendo Oski, os ha salido una historia genial. Tiene de todo, misterio por saber que se ocultará detrás de ese nombre, la habitación del deseo. Intriga hasta que llegais a ella, asombro al ver lo que hay dentro y terror para concluir un relato de pm narrado.
ResponderEliminarOs ha salido muy bien, en serio que me gustó mucho. La verdad es que lo de los niños sin cara me dejó helado!! Uffff. Mis felicitaciones!!
Un abrazo!!
PD: no se si es mi PC o que, pero no veo nada en cursiva, igual es mi navegador que no lo ve o igual es que se te olvidó ponerla! ;)
Lo de la cursiva... va a ser como "El traje del emperador", que sólo lo veían los listos... Pues lo mismo! :P jajajaja
ResponderEliminarP.D. Porque yo la veo ehh! ;)
Yo si veo la cursilla!! soy lista?
ResponderEliminarMe habeis dejado flipada con el final chiquillos!! en serio que no me lo esperaba. Estaba deseando que llegara el final para saber lo que pasaba y bueno... que este podría ser el comienzo de una peli de terror.
Me ha encantado en serio. Hacía mucho que no venía a visitaros y ha merecido la pena.
muchos besos. a los dos
Francamente...a falta de una palabra mejor...fascinante. Este mano a mano a sido fantástico, mis más sinceras felicitaciones a los dos!!! Me ha gustado mucho la trama, sobretodo la manera de describirla de cada uno, y por supuesto los elemnetos aparecidos me han encantado (tanto Alejandro Sanz, con su canción de "Se le apagó la luz, tembló...como el poster de la maravillosa "Gilda" película que adoro.") En fin, es bello ver tanto arte y tantas ganas reunidas, estais hechos unos artistas!!!
ResponderEliminarTe dejo un ramo de besos lindo cisne, casi tan brillantes como tú ;)
Un abrazo enorme niño!!! Nos seguimos las huellas!!!
Excelente! Se han puesto de acuerdo de una manera que nos fueron llevando sin perder el hilo de ninguno de los dos textos. Felicidades!
ResponderEliminarSaludos a los dos!
Guau!!! Qué pasada!
ResponderEliminarMe ha encantado, si vais a hacer cosas como esta, por dios!!! colaborad más a menudo!!!
Jejejejjeje
Salu2
uf ¡pero que miedo he pasado!, Ha quedado muy bien, felicidades a los 2 por vuestro mano a mano. Salu2.
ResponderEliminarGenial, un final buenísimo.
ResponderEliminarOs felicito a ambos por esta buena comunión al escribir.
Os dejo un besito ;-)
Como le decía a María, me encantó la historia y es que el misterio y la intriga son mi debilidad :)
ResponderEliminarAdemás, me gusta como escribís los dos por separado así que juntos sólo podía salir una historia tan buena como esta.
Mi más sincera enhorabuena a los dos, de verdad.
Besos!!!!!
Genial!!!!! Bravo a los dos, porque habéis conseguido una historia increiblemente buena.
ResponderEliminarYo también os pido más colaboración entre ambos, si el resultado es tan fascinante.
Un abrazo.
Me encanta la historia....y ese derroche de complicidad entre vosostros...
ResponderEliminarUn beso,
Hilda
Así que es un relato dual... Pues viva la dualidad! Sólo puedo decir que me ha encantado. Espléndido final...
ResponderEliminarUn beso dulce
PD: Perdón por el retraso
¿Seguro que la letra en cursiva es de Maria? Porque ese "se le apagó la luz" es un poco sospechoso... jijiji...
ResponderEliminarBueno, me encantan las colaboraciones, eso para empezar. Un digno sucesor a la balada del lago, hacéis una buena pareja artística!! ;)
Un aplauso para vosotros!!
Besitoss
Pd. Esta semana toca tu frase... y ya sabes que pasa con los que publican frase en mi historia, ¿verdad? Lo dejo en tus manos, que yo solo asesino a los que se dejan!! :p
Vengo del blog de María, me ha encantado!!! Te dejo aqui lo que le he dicho a ella:
ResponderEliminarJoe chicos, que miedo he pasado!!! Se parece un montón a mis pesadillas! Ya me estaba cabreando yo porque atropellan al gatito y se quedan tan panchos, jajaja, y los pobres han pagado y con creces. Dios que miedo de habitación.
Es muy original, os habeis salido esta semana.
Muchos besosssssssss
Niño!!! No sé si (a la hora que es) ya habrás vuelto de ese lugar que trae tantos recuerdos, pero quería pasar a dejarte un abrazo enorme, por si vienes con la cabecita un poco agachada :)¿Sabes que se te aprecia mucho por aquí verdad? Tú nunca caminarás solo (aunque seas solitario jejeje!!! Todos los grandes seres lo son ;)... Despliega tus alas bello cisne ;)Tienes más valor del que a menudo te acreditas :)
ResponderEliminarMiles de besos precioso!!!
Bueno mi niño. Creo que aunque como tu dices no es tu estilo, tu dominas casi cualquiera mi amor. La historia me ha gustado mucho, muy rara, y eso me gusta, lo que no me ha gustado es el final tan abierto. Quizás necesitaba por lo menos para mi algún tipo de final. Pero la vida es así, y hay tantas diferentes habitaciones del deseo...
ResponderEliminarUn beso ohhhhhhhhh baby, y miles de abrazos mi niño
O.O que miedoooooooooooo!!! no voy a volver a ir a un parque de atracciones nunca nunca nunca ni voy a atropellar gatos (bueno, eso no lo hago e?? jajaja) y ni de coña me acercaré a un niño que llora porque y si cuando levanta la cara no tiene e'????? e????
ResponderEliminaren fin, que superchulo, que te metes en la historia por completo, me encanta muchos bessos!!
Es una historia curiosa, como un dueto a dos voces, la misma melodía con diversos matices. Es inquietante.
ResponderEliminarEstas invitado a jugarel juego del 8, en mi blog www.letrasenelcamino.blogspot.com
ResponderEliminarsaludos,
Pero que miedo!!! y encima a estas horas!!! y ahora como duermo yo???
ResponderEliminarUna historia genial, llena de misterio, confieso que cuando he empezado a leer no esperaba una historia de miedo y mucho menos el final, (de echo me esperaba algo totalmente diferente)
Una historia muy muy buena, felicidades Oski os ha quedado genial!!
Un beso, me voy a felicitar a María
Muy buen final.
ResponderEliminarFelicitaciones al duo.
Fascinante relato.
Saludos
Oso
Un final genial y perfecta unión de letras entre María y tu...a mi no me gustan los parques de atracciones pero creo que después de leeros menos que nunca, jejeje
ResponderEliminar:D
Jo! recordadme que no vaya nunca a ese parque!!! jaja. Yo tengo un trauma con los gatos negros encima :S es que me persiguen!!!
ResponderEliminarenial como os habeis complementado en esta historia, nos dejais con un nudo en el estómago!!
Un besito
Hola! vengo a leerte dsd el blog de María y a decirte q la historia m ha parecido cojonuda. Haber alargado + el final habría sido un error y habríais caido en una redundancia innecesaria. Pero eso no es + q mi humilde opinión como inepto de las letras xD
ResponderEliminarAunq tb te diré q lo + sorprendente d todo al menos para mi, es el hecho de ser el 9º en dejar opinión en el blog de tu socia y akí el 25º. No me interesan demasiado los entresijos de vuestro club selecto de escritura, pero viendo el ekilibrio y la ekitatividad q hay, casi q menos!
Un saludo!
GELO
Muy buen relato a duo, me ha gustado, concuerdo con los comentarios anteriores, lo han hecho bien tu y Maria.
ResponderEliminarEn mi cabeza no deja de dar vuelta la imagen de "el hombre sin rostro que llora"...wow! me ha gustado.
Cuidate...un abrazo
Me ha gustado mucho. Si por separado me encanta vuestro estilo la unión hace la fuerza. Además el final es muy contundente. Os compenetrais muy pero que muy bien y el estilo de parrafos encaja a la perfección. Y que decir de la historia, como desarrollais lo que parece un día vulgar y corriente y jugais con la idea de un encuentro romantico en un parque de atracciones en "La habitación del deseo"
ResponderEliminarMi más sincera enhorabuena.
Un abrazo,
Pedro.
Felicidades por una obra muy bien construida y mejor desarrollada que partiendo de vidas cualquieras una mañana cualquiera desapercibidas en el conglomerado urbano, la narración va in crescendo y aumentando la angustia sobre que aguardará tras cada puerta, para con una cierta pausa marina volver con fuerza a elevar la tensión hasta de repente la nada.El silencio roto con sollozos. Desesperación. Y ese gato... Ya se que le pediré al geniecillo killo! un perro xD
ResponderEliminarEnhorabuena por un gran relato! Un abrazo!
Precioso...
ResponderEliminar¡Se me pararon los pelos!
ResponderEliminarLo asocié con esos hoyos negros,
con la succión de la antimateria,
con lo que anula...
Qué susto...
Tus relatos uno nunca imagina
en qué van a terminar,
por eso me gusta venir a leerlos.
olie
wow! lo que mejor describe lo que me ha causado lo escrito, me ha cautivado. felicidades a ambos les ha quedado de maravilla.
ResponderEliminarEs tan envolvente que realmente uno no desea que termine. verdaderamente exelente.
besos-
Genial OSKI, espero que esta colaboración tuya con María no sea la única y os pongaís más veces de acuerdo para hacerlo juntos.. me refiero a escribir jajaja
ResponderEliminarComo ya le he dicho a ella me ha encantado.
Besos.
Genial, muy sorprendente. Sabes? esto me lo podía esperar de ti, pero con María me ha sorprendido más. Os felicito a ambos, da gusto leer historias como esta; habeis hecho muy buen trabajo encanto.
ResponderEliminarMe voy a felicitar también a María.
Un beso muy grande
Por fiiiin!!! Os empece a leer hace unos dias...(me quedé cuando el atropello del gato...justo antes de llegar al parque...) pero lo tuve que dejar a medias :(
ResponderEliminarOs ha salido una chulada de relato...muy inquietante y con mucho suspense. Me habeis sorprendido mucho con el final..ainhs...eso les pasa por atropellar a gatitos e irse como si nada ^^
pobre Maria ...tiene peor destino que el tuyo...voy a comentarle a ella ahora mismo.
Hasta otra!!!
Muy buena combinacion de talentos ¡¡ENHORABUENA!! Os ha quedado una historia fantastica, tetrica, pero fantastica :D
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